viernes, 9 de mayo de 2008

El deseo costoso

La excitación venérea en que se traduce, con harta frecuencia, nuestro deseo, nos lleva al exceso de pensar que todo se puede comprar y queremos, literalmente, cubrir a la persona de quien esperamos correspondencia de todo tipo de lujos. Compramos así, prostituyéndola, la satisfacción. O la mala conciencia.
A veces es la otra persona, la deseada, quien pone precio a nuestro impulso. El anhelo, cuanto más vehemente es más nos hace caer en comportamientos ridículos, propios del folletón popular. Rebajamos, con ello, al otro y, sin quererlo, lo depreciamos. Hubo una película, Una proposición indecente, que jugaba con esto: un millonario ofrecía a un matrimonio un millón de dólares a cambio de pasar una sola noche con la mujer.
En la irracionalidad en la que se suele convertir nuestro deseo cuando nos desborda, todos ofrecemos regalos, como esos pájaros que traen objetos relucientes a las hembras. ¿Todos, también, tenemos un precio para ceder al deseo del otro?

28 comentarios:

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

Materialmente hablando no sabría decirte...aunque apostaría que casi todo tiene su precio. Me recuerda esta idea tuya ese populismo "el pan como hermanos y el dienro como gitanos" saludos y buen fin de semana

Teresa dijo...

qué bueno la comparación con las urracas. Todos los cortejos presentan un pavoneamiento espectacular y ridículo visto desde afuera. Pero eso también sucede cuando no bailamos y vemos a los demás.

La película que citas presenta un cúmulo de situaciones contradictorias e irreales y a la vez... muy sugerentes, tiene que subirle a uno la moral eso de que quieran pasar una noche contigo como un capricho inalcanzable(sin entrar en más valoraciones)

Teresa dijo...

¿y un bombero en gallumbos?

comprende que el sector femenino mayoritario, tenemos que comentar a palo seco en este blog. El esfuerzo mental (tampoco es tanto en comparación) es muy mayor (jajajaja)

Isabel Huete dijo...

quizá haya mucha gente que mercadee con su deseo, o sus deseos, pero creo que más que placer, en caso de satisfacerlo, deben sentir un tremendo vacío. Lo inmaterial, cuando es de buena calidad, no puede comprarse ni venderse. Pienso yo.
Besos, corazón.

Merche Pallarés dijo...

Ya vi esa pelicula y me pareció una americanada mas, pero tienes razón, generalmente el hombre cuando desea con vehemencia suele hacer regalos pero creo que eso está, por naturaleza, en los genes de los machos--sean animales o personas--y tiene que ver con la conquista en sí, como "esos pájaros que traen objetos relucientes a las hembras". Al revés lo veo dificil. Besotes, M.

Euphorbia dijo...

Me ha gustado la metáfora del pajarito. Esto que cuentas hoy, para mí es la semilla de la posesión que luego puede derivar en cosas peores. También puede ser falta de autoestima que hace creer que donde no llega el atractivo o la inteligencia o la simpatía, puede llegar esa pulsera tan cara.
No deja de ser prostitución; una relación tiene que estar basada en el respeto mutuo y si no lo hay pues mejor buscarse a otro... o a otra.

Pilar_Cordoba dijo...

Quien sabe... hay tantas barbaridades que se escuchan por ahí, que hoy día no es extraño ponerle precio a nuestros deseos, sean carnales ó materiales. Sin ir más lejos, ayer escuché en un programa de radio una llamada que le hicieron a un chico que alquilaba a chicas una habitación que le sobraba en el piso a cambio no de dinero, sino de sexo.
Así que... ya lo ves, en los tiempos que corren, la gente pretende satisfacer sus deseos a cambio de cualquier cosa.

Anónimo dijo...

Ha provocado mi preocupación, la situación en la que queda el derrotado en su lucha por cubrir, literalmente, o ganarse el favor de la hembra en esos documentales vespertinos de TV2 que uno ve en duermevela, mientras espera la llegada de los ciclistas a la meta en otra cadena. En este asunto, el humano no es tan cruel, siempre hay “un roto para un descosido”, sólo hay que saber esperar y no perder la paciencia. Además, ahora el emparejamiento está desprestigiado, lo inteligente es continuar single, aunque haya un deseo venéreo ¡Qué mal suena esta palabra en esta acepción! pancho

Anónimo dijo...

Yo creo que todo, llevándolo a situaciones límites, tiene su precio, aunque después te arrepientas toda tu vida. Besos Isabel.

Silvia_D dijo...

No me he planteado nunca el dar con amor como una prostitución, pero tal como lo planteas y basándonos en realidades o películas , sí que tiene base.
Pero en el fondo.. que no es intercambio prostituido o no, en esta vida?
El precio para ceder al deseo del otro es que se vean los nuestros cumplidos ;)
Besos decentes :)^^

Anónimo dijo...

el precio de cada uno también puede depender de la necesidad económica, el momento en que llega o las ganas de mejorar. Sin duda, todos tenemos un precio. Un abrazo.

Peter Mc Cut dijo...

yo creo que todo tiene precio, lamentablemente... economico, social, intelectual, etc.
La peli tambien me parecio una americanada, pero si te ofrecieran el millon de dolares (de euros seria mejor), que harias?
un saludo

jg riobò dijo...

Y ¿cómo te sienta un regalo ínfimo realizado con las manos?
Te deshaces.

matrioska_verde dijo...

sin dudarlo, creo que todos tenemos un precio, que no tiene porque ser un precio material en el sentido estricto... más que precio, yo diría que tenemos un punto débil...

la citada película a mí me dió mucho que pensar...

y me pongo en el caso de si yo fuese Demi Moore:

la cifra que ofrecía Robert por pasar la noche con Demi era asquerosamente irresistible pero es que Robert me parece también asquerosamente irresistible y sería una tentación indecente teniendo en cuenta de que existe un vínculo matrimonial de por medio...

ufff!!!... espero no verme nunca en el caso... je je je

bicos,
Aldabra

p.d.: todavía me queda mañana para ponerme con el quijote... es que hoy se me fue la tarde sin querer con cosas pendientes y claro, la lectura siempre me queda para el final... Espero Sr. Profesor que no me regañe.

Lágrimas de Mar dijo...

muy buena pregunta, quien sabe, quizás sin saberlo todos tenemos un precio

beso

lágrimas de mar

Pedro Ojeda Escudero dijo...

MANUEL: yo también apostaría. Saludos.

BIPOLAR: y sobre todo ridículo para los machos, todo hay que decirlo.
En lo que dices de la película, ese aprecio ya es una puesta en valor. A veces más cara que una cifra económica.
Tienes razón en lo otro, pero comprende que uno tiene también sus impulsos. Sin embargo, habrá sorpresa como la que me pides en esta serie de "deseo". Atenta a la pantalla.

ISABEL H.: conozco gente que con el dinero satisface plenamente su vida. Es triste, pero existen. Besos.

MERCHE: bueno, todo se andará, todo se andará. Besos.

EUPHORBIA: a veces es falta de autoestima, como dices, en otras ocasiones es exhibición de poder. Somos así de simples. Y no deja de ser prostitución, en efecto.

DESPLAZADOS: todo se vende y se compra en este libre mercado.

PANCHO: ¡qué bien están colocados estos documentales en la parrilla televisiva! No estoy tan seguro en lo de que siempre hay un roto para un descosido, a veces es porque no hay otra oferta mejor. Vaya usted a saber. O quizá sí tengas razón. Lo del deseo venéreo viene en el diccionario (de ahí el enlace en el texto, para que no pensarais mal) y los académicos dicen que es de Venus...

ISABEL: o no... ¿o sí? La mente humana se especializa en la desmemoria.

DIANNA: en efecto. Así que cuando uno se encuentra cualquier tipo de relación sin interés, hay que hacerle un monumento. Besos (sin calificar).

FERNANDO: en efecto: la circunstancia suele atenuar la adjetivación moral... o justificar el hecho. Todos, eso creo también.

PETER: eso, ¿qué haría cada uno? Respondámonos con sinceridad. Saludos.

JAVIER: pero sólo si hay algún tipo de correspondencia emocional, querido amigo. Si no...

ALDABRA: ese es un defecto de la película citada: muchas ni siquiera esperarían a oír la oferta económica. ¡¡Es R.R., por Dios!! Besos.
Bueno. Pero no lo dejes mucho, que cada jueves va un capítulo y como te quedes atrasada, ya verás qué mes de vacaciones cervantino te pasas...

LÁGRIMAS: yo creo que todos lo sabemos, sólo nos falta la cifra. Besos.

Merche Pallarés dijo...

Referente a tu respuesta a mi comentario, sí que hay mujeres (hoy en dia) que llegan a pagar o hacer regalos a hombres pero no es por "conquistar" como hacen los machos sino para que se acuesten con ellas simplemente (aunque sé que en, el fondo, el caso de los hombres viene a ser lo mismo pero, a veces cuesta mas, de ahí la conquista). Besotes, M.

JESUS y ENCARNA dijo...

Buenos dias Pedro.
Esto es propio de una sociedad imbuida al consumismo y a valorar a las personas con aquello de tanto tienes tanto vales....
Yo supongo que se refiere, a las posesiones y valores de tipo material (dinero,Bienes inmuebles, joyas, grandes casas,muchos coches,etc...).Porque de lo contario no se explica, claro esta que tal y como esta montado todo necesitas una casa, ropa,coche,trabajo,salud,cultura, amor,saber respetar,dinero y poca cosa mas.Ah! se me olvidaba y un buen conocimiento de nuestra Madre Natura, imprescindible.....
Buena exposicion la tuya en este post, que invita a la reflexion.

Saludos.

Jesus

Pedro Ojeda Escudero dijo...

MERCHE: de todo hay, de todo hay. Aunque es más frecuente ese comportamiento entre los hombres, comienza a ser frecuente entre las mujeres. Cada vez somos más iguales en estas cosas. Besos.

JESÚS: de tu lista yo he quitado el coche. Y resulta que puedo vivir sin él a pesar de que hago varios miles de quilómetros al mes. Gracias por tus palabras, que son todo un acierto. Saludos.

Unknown dijo...

reniego de la afirmación de que todos tenemos un precio.
Igual soy una ilusa.

Anónimo dijo...

Creo que una persona enamorada es capaz de anularse a sí misma con tal de complacer al ser que ama y tu deseo es satisfacerlo.
Como comentario a la película que mencionáis yo aceptaría el reto, pero tienes que estar muy preparada para que después no influya en tu vida de pareja, el riesgo a fracasar es obvio una vez que vuelves a tu realidad.
"Contigo pan y cebolla" son ideales de la época hippie, yo no los comparto, pero cuando me enamoro no pregunto por su cuenta corriente, ¿por qué? por que ya estoy pillada.
¿Lo bueno? pues que cuando se acaba el enamoramiento y la pasión decae es cuando empiezas de verdad a hacerte preguntas.
Vaya lío...
Besos.
Nina.

Anónimo dijo...

Hola ¡¡¡

Llego aqui a traves de la " Conexion Burgalesa ¡¡¡

Que bien te entiendo, leer y escribir en los blogs propios y de estos amigos se ha convertido en una rutina mas.

Cenar, leer blogs, un pis y a la cama ,,,

Se te sigue desde detras de la mata.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

MAFALDIA: haces bien. Es bueno que haya gente como tú: nos hacen creer en esta especie. Besos.

NINA: Eso, el lío comienza en el momento de las dudas y preguntas... Besos.

BLOGÓFAGO: pues no te has escondido bien o la mata no es muy grande, porque se te ve. ¿Qué pasa con la comida bloguera finalmente? Saludos, amigo.

PILAR dijo...

A veces un regalo, sin más, es simplemente la manifestación de una parte del cariño.
No tiene que ser costoso.
No por costoso ha de gustar más.
El pequeño detalle, en el momento crucial...
A veces es saber hacer las cosas a tiempo.
Nunca he soportado que me compren con regalos, me ha producido el efecto contrario...

Pedro Ojeda Escudero dijo...

PILAR: te comprendo y lo comparto, pero la entrada no hablaba de estos detalles sino de cuando el deseo nos lleva a estos gestos. Besos.

XuanRata dijo...

Esta es una de esas cuestiones que solo algún privilegiado podrá responder con conocimiento de causa. Los demás seguiremos puros.

Estupenda la foto: ese escudo protegiendo al edificio contra el vacío frio del aire. Muy buena composición con esos tres planos y la diagonal.

PILAR dijo...

Comprendido.
Entonces es la utilización de la otra persona, y la cosificación.
Pero insisto, cuando he percibido que detrás de un regalo había un deseo escondido (no sé si me explico) me he sentido fatal y me han dado ganas de devolverlo.
Cuando he recibido un regalo en el que veía que detrás de él había un deseo "comprador", me he sentido tan utilizada que me han dado ganas de rechazarlo en ese momento.
¿Me he explicado?

Pedro Ojeda Escudero dijo...

XUANRATA: ¡es una magnífica forma de verlo! Déjame ser malo: ¿Desearemos entonces que no nos toque la lotería para seguir puros?

PILAR: Perfectamente, en eso tienes toda la razón: hay demasiados que quieren comprar voluntades con regalos. Lo malo es que, a veces, funciona...