lunes, 31 de diciembre de 2007

Fragilidad ante el tiempo

Apenas hay protección bajo la desnudez de nuestro interior. Pese a la fragilidad, el árbol afronta el cielo mientras se gana por dentro,
a la espera.
Que la inclemencia del tiempo nos sea, a todos, leve.
Os deseo lo mejor para este 2008 inminente.

17 comentarios:

Anónimo dijo...

Pedro, eres tan amable, sensible y escribes tan bien, que es imposible no pasar por tu blog todos los días. Lo mejor también para tí y que el 2008 nos trate bien a todos. Hoy no seré "anónimo", soy Isabel. Un afectuoso saludo.

Rubén10 dijo...

Gracias Pedro y lo mismo te deseo.
Un saludo.

Anónimo dijo...

Pedro, te deseo lo mejor para el 2008

jg riobò dijo...

Magnífica la idea de que el cielo nos protege al desnudarse los árboles.

Anónimo dijo...

…a la espera… de la primavera que siempre llega con gélido retraso a la ciudad, si es que llega, porque a veces no llega ni a tiros. Te deseo, desde la soleada A, lo mejor para el próximo año.
Un abrazo y beso a S. Hasta pronto.

Antonio dijo...

Procuro que la inclemencia del tiempo sea, como dices, leve. Decías en mi blog que tengo una cierta preocupación con la edad; en realidad, mis visiones hacia el pasado no son más que pequeños toques de nostalgia. Intento sacar siempre el máximo partido al presente y tratar de hacer que el futuro sea lo mejor posible, satisfecho del tiempo transcurrido y convencido de que quedan muchos buenos momentos por venir.

Feliz 2008, en el que nos seguiremos leyendo.

Anónimo dijo...

Igual que las inclemencias provocan la desnudez interior, desde lo más hondo surge el empuje necesario para la posterior regeneración.
All the best for you and yours. See you next year!!!

BOTHMAN dijo...

Que el árbol afronte el cielo, pero eso sí, nunca solo. Feliz 2008 y los mejores deseos para tí también.

jg riobò dijo...

Feliz año.

Luis Felipe Comendador dijo...

Feliz año, chiquitín

Es lo de menos dijo...

Pedro, que este año que hoy iniciamos sea como mínimo como el año que hemos dejado atrás

Saludos

Anónimo dijo...

Pronto vendrán ellos
Estaremos inmóviles
Totalmente desamparados
Entregados a sus hachas
Rendidos

Parecerá que no sentimos
Adivinarán nuestra savia
No habrá piedad

.........................
¿Podarán nuestra acequia?

Pedro Ojeda Escudero dijo...

ISABEL: Qué agradable que des el paso al nombre. Sigue con él, y gracias por tus amables palabras.

RUBÉN: Saludos. Buen año.

BLOGÓFAGO: Gracias, y enhorabuena por el holograma, que al fin he podido ver. Buena idea.

JAVIER: Esa era la idea: y afrontar la inclemencia sin protección. Y gracias por tus buenos deseos para el año.

ANÓNIMO (pero L.): Desde la soleada A. se ve de otra manera este invierno. La pena (para ti) y alegría (para mí) es que volverás pronto. Traslado tu beso. Y otro para P.

ANTONIO: Se te notan las dos cosas: la añoñaranza inteligente y la vivencia del hoy. Sigue así. Feliz 2008 también para ti.

PANCHO: Lo mejor también para ti, mi muy inteleginte lector.

BOTHMAN: Feliz 2008. Nos seguimos leyendo.

LUS FELIPE: Lo mismo para ti, grandullón. Un abrazo.

ELDM: O mejor. También para ti. Saludos.

BIPOLAR: No. Haré todo lo que pueda. Un abrazo.

Gracias a todos. Iniciamos un nuevo año.

Pilar dijo...

Joder! Con perdón, sé que tu no acostumbras a decir tacos.

Es que esto pasa tan rápido y tan deprisa...que a veces es un poco agónico...

Debe ser la edad (gegege).

¡Qué frágil me siento!

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Hola, PILAR, me alegro de tu regreso. En efecto, la vida es algo que pasa tan deprisa que, si no nos damos cuenta, se nos ha ido.

Caelio dijo...

Don Pedro, falto yo. Por simpatía y proximidad he de manifestar mis mejores deseos. El influjo de la Navidad desvirtúan estos deseos, tu lo sabes. Como también sabes que mis deseos son sinceros y en cualquier día del año.

Un celtíbero abrazo.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Otro para ti, querido CAELIO. Echo de menos alguna caelia en tu compañía, espero que pronto se cumpla. Sería un buen comienzo de año.